Analizando tus verdaderas motivaciones
El instinto de paternidad es consecuencia de la maduración psicológica del hombre y de la mujer, por esta razón el mejor consejo es conocer de antemano la gran responsabilidad que un hijo requiere y analizar en profundidad cuáles son las verdaderas razones para desear tenerlo. A veces no es tan sencillo conocer cuáles son los verdaderos motivos, y por esta razón te daremos una pequeña ayuda. A continuación te mostramos seis de los más frecuentes motivos y cuáles de ellos son los errores que se pueden cometer.
Deseo un hijo por tener descendencia
Muchos hombres desean a cierta edad tener un hijo solamente para transmitir sus genes a una próxima generación. En general estos padres terminan siendo solamente los responsables económicos de la crianza de sus hijos y no se involucran en ella. La mayoría no soporta las etapas de desarrollo del niño, es decir, no quedarse quieto, ensuciarse, romper, correr, etc... e intentan solamente imponer reglas y hábitos no adecuados para la edad del niño. En estos casos es preferible postergar la decisión ya que la paternidad se convertiráen un sufrimiento para toda la familia, y en especial para el niño.
Deseo un hijo para superar una crisis
A veces el deseo de tener un hijo se ve ligado a un hombre que quiere llenar un vacío en su vida. Ya sea un problema con su pareja, la muerte de un ser querido o bien para superar un problema psicológico. En todos los casos esta también es una decisión equivocada. En estos casos lo más probable que suceda es que el padre termine sintiendo en el futuro una sensación de resentimiento con su hijo que estropeará su relación con él y su vida en pareja.
Deseo un hijo para complacer a mi mujer
Este es una de los errores más frecuentes, ya que la mujer suele imponer de muchas formas el deseo de tener un hijo. Lo que sucede más frecuentemente es que la mujer que se acerca a los 30 años comienza a sentir este anhelo con más entusiasmo y aumenta con cada año que pasa. Inevitablemente este deseo se lo transferirá a su pareja y si éste no lo desease podrían comenzar los problemas. Es muy difícil en estos casos dar un consejo, lo que sí debes saber es que la paternidad no debe ser impuesta, sino que debe ser fruto de tu maduración psicológica. Un padre en estas circunstancias primero se inhibirá en los cuidados del recién nacido y en el acompañamiento en su desarrollo y luego se agravarán los problemas con su pareja.
Deseo un hijo para compartir nuevas emociones
Si este es tu deseo vas por el camino correcto. Un hombre que desea tener un hijo por esta motivación en realidad busca vivir nuevas experiencias enseñándole el mundo a su pequeño, y que además lo relacionarán con su infancia. Participar en la crianza del niño y compartir junto a tu mujer sus primeras pataditas en la panza, su primera sonrisa, sus primeros pasos y su primer PA-PA, generará sin duda un vínculo de protección, amor y armonía, que establecerán para siempre una relación sana que te llenará de satisfacción.
Deseo un hijo para crear una familia
Esta es tal vez la decisión más acertada ya que es consecuencia de una maduración psicológica tanto del hombre como de la mujer. Generalmente está ligada a padres que primero disfrutan los primeros años en pareja sin niños, afianzando la relación con su mujer y posibilitando conocerse en profundidad. Con esta base y con los años surge el deseo de crear un familia, que será fruto del amor que estuvieron construyendo durante los primeros años.
Deseo un hijo para darle amor
Este simple motivo es también uno de los más acertados. No existen razones de ninguna clase salvo la necesidad casi instintiva de darle amor a un hijo. Es el que tal vez da los mejores resultados, ya que un padre que brinda mucho amor a su hijo sin duda lo recibirá de vuelta en el futuro entre las más cálidas y gratificantes muestras de cariño.
miércoles, 7 de noviembre de 2007
Tener un hijo
en 11:43
Etiquetas: embarazo, futuros padres
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